¿Qué es una phablet?
Así se llaman los teléfonos de entre 5 y 7 pulgadas. Son más grandes que el smartphone “tradicional” y más pequeños que una tablet. Cuáles son las claves de estos equipos y qué modelos se pueden conseguir en Argentina.
La tecnología vive de las modas. Hace una década, los fabricantes de celulares competían para ver quién lanzaba el equipo más pequeño. En la era smartphone, la cosa cambió y ahora son cada vez más grandes, para incluir pantallas de mayor tamaño. Así nació el término phablet, combinación de teléfono (phone) y de tablet.
Los más importante de una phablet es su pantalla que, aunque no hay una regla muy clara al respecto, debe tener un tamaño de entre 5 y 6,9 pulgadas. Pueden parecer gigantes, pero ahora la pantalla sirve para mucho más que llamar o enviar mensajes de texto: se puede a acceder a las misma funciones que una computadora personal, por lo tanto, hace falta más espacio para mostrar más información.
El principal jugador en este segmento es Samsung, que hizo pie en el mercado con la línea Galaxy Note, cuya segunda generación tiene una pantalla de 5,5 pulgadas, un procesador de cuatro núcleos, 2 GB RAM y cámara principal de 8 megapixeles. Pero, para diferenciarse del resto, la firma surcoreana le agregó un stylus (lápiz) para poder tomar notas en pantalla. Se vende desde 3.700 pesos (Personal) con abono.
No obstante, hay muchos otros modelos más que pueden considerarse dentro del rubro Phablet. El propio Galaxy S4 posee una pantalla de 5 pulgadas y un hardware de alta performance, especialmente por su procesador Exynos de ocho núcleos, que también se vende en la Argentina desde 4.300 pesos (con abono). Y con el Galaxy Mega, la firma surcoreana fue más allá y ofrece un teléfono de 6,3 pulgadas, aunque con hardware más acorde a la gama media al disponer de un procesador de doble núcleo.
Samsung no es la única que apuesta a los teléfono “gigantes”. Sony tiene en su catálogo al Xperia Z Ultra, un equipo resistente al agua y al polvo que cuenta con una pantalla de 6,4 pulgadas con resolución Full HD (1920×1080). Y, en este caso, viene con un procesador de cuatro núcleos. Por su parte, Huawei, uno de los fabricantes chinos que poco a poco va ganando más protagonismo en el mercado, se animó con el Ascend Mate, un terminal con pantalla de 6,1 pulgadas que se destaca por su procesador de cuatro núcleos y una super batería de 4050 mAh para que el display no agote rápidamente la carga.
Ahora, ¿las phablets tienen futuro? La respuesta parece ser un sí rotundo. Según revela el sitio de finanzas Forbes, se estima que el segmento permitirá ingresos de 46.000 millones de dólares durante este año. Y este nicho aumentará un 63 por ciento anual: de las 150 millones de phablets que se venderán en 2013 hasta las 350 unidades que se despacharán en 2016.
Como prueba de este crecimiento, no sólo los fabricantes que utilizan a Android (los ejemplos que citamos anteriormente) son los que apostarán a las Phablets, sino que el mismísimo Apple estaría pensando en incursionar en este mercado. Desde el primer equipo lanzado en 2007 hasta el modelo 4S lanzado en homenaje a Steve Jobs, el teléfono de Apple contó con una pantalla de 3,5”, tendencia que quebró el año pasado con el iPhone 5 y su display de 4 pulgadas. Las versiones indican que la próxima generación de iPhone (quizás llamado, “5s”) contará con una pantalla de 4,3 pulgadas, en una leve progresión hacia displays más grandes.
Ventajas y desventajas de las Phablets
Ya sabemos lo que todos van a decir: semejante equipo debe tornar incómodo realizar un simple llamado telefónico. Pero, para la sorpresa de todos, se calcula que apenas el 10% de todo el tiempo que se utiliza un smartphone es para realizar llamadas. Las funciones de Internet (navegación, correos, redes sociales) y los juegos aparecen como los principales usos de un teléfono inteligente.
Por el lado de las ventajas, hay que destacar que una mayor pantalla permite ser mucho más productivo, porque es más cómodo para visualizar y tipear textos, en comparación con teléfonos más pequeños. Si se compara con las tablets (de hecho, el hardware es bastante similar), las phablets son más portables, pues además de ser más pequeñas pesan alrededor de un tercio.
En cuanto a las desventajas, hay que remarcar que el uso de una phablet requiere de las dos manos para su operación. El ancho de estos equipos no permite tomarlo con una mano y estirar el pulgar para acceder a ciertas funciones. Otro problema adicional es la vestimenta: los bolsillos de las prendas femeninas (y algunas masculinas) no están preparados para las phablets.
Las phablets parecen ser la próxima revolución dentro de las comunicaciones móviles.